lunes, 15 de septiembre de 2025

Fran y Jorge: la inteligencia irónica que nos hace falta

Mis aspiracionales cuatro lectores, hoy les platico sobre dos escritores, a los cuales ya podría considerar en la categoría de "Héroes" para mí, uno conocido de hace años y una recién descubierta.

El primero es el autor mexicano Jorge Ibargüengoitia, cuyo apellido "trabalenguoso" no vuelves a olvidar una vez que empiezas a disfrutar de sus libros. A Jorge lo descubrí gracias a la magnífica revista mexicana Algarabía, lo que me impulsó a buscar estos dos hilarantes libros que son una selección de los artículos que escribió para el periódico mexicano Excelsior de 1968 a 1976. Su increíble ingenio (lo que en inglés se conoce como wit) aplicado a la idiosincrasia del mexicano, nos dejaron una gran colección de artículos que te arrancan unas grandes carcajadas.

"Misterios de la vida diaria" e "Instrucciones para vivir en México".

Pero Jorge fue además un prolífico novelista, y algunas de sus obras fueron incluso llevadas al cine, como "Estas ruinas que ves".

Dos de sus excelentes novelas.

Personalmente disfruté mucho más de sus artículos para el Excelsior, pues la ironía con que describe cosas tan cotidianas que vivimos los mexicanos aún el día de hoy, te hacen pensar: "¡Eso mismo me ha pasado y pienso exactamente lo mismo!".

Se los recomiendo mucho, por si no lo han leído.

Qué lástima que se nos fuera tan joven, a los 55 años, en un accidente de aviación, en España. Afortunadamente, como bien decía el Maestro Sandro Cohen: "El escritor [...] posee un arma secreta: las palabras escritas permanecen, mientras que las pronunciadas en voz alta se las lleva el viento".

Y recientemente descubrí a la magnífica escritora estadounidense Fran Lebowitz, gracias al documental de Netflix titulado "Pretend it's a city", dirigido por Martin Scorsese. Este es el trailer.


Fran sigue viva —algo que ella dice que a algunas personas las hace enojar— a pesar de fumar desde los 12 años y vivir —o sobrevivir— en Nueva York desde los 18. Y a sus casi 75 años mantiene su ingenio y agudeza intactos. Pueden encontrar en Youtube muchas entrevistas y sesiones de preguntas y respuestas con ella. Son entretenidísimas y cargadas de humor inteligente.

Sus primeros dos libros fueron compilados en uno solo llamado en inglés The Fran Lebowitz reader, y en español le pusieron Un día cualquiera en Nueva York.  Espero en octubre llegue mi ejemplar en inglés, porque quiero tenerlo y leerlo en el idioma original.

Súper entretenida lectura.

Conforme la he leído y escuchado, veo que coincidimos en bastantes cosas, aunque en otras discrepamos (personalmente la política no me interesa). Pero siempre me saca una sonrisa lo que esté leyendo de sus escritos.

Una de las cosas con las que coincido con ella es la importancia de leer. De hecho, cuando le preguntan que qué recomendación les daría a los jóvenes que quieren ser escritores, ella invariablemente contesta que no vayan a una escuela de escritores, sino que mejor se dediquen a leer y a aprender gramática. Y tiene sentido: de esa manera desarrollas tu propio estilo —y no uno institucional, todos los alumnos teniendo el mismo—. Pero la gramática, esa sí es crucial.

Y otra cosa que aconseja es: si no tienes talento en algo, no lo intentes hacer de manera profesional. Simplemente, no. No lo hagas. Ojalá muchos "artistas" e "influencers" pusieran atención a sus palabras. Pero es algo de lo que ella se queja: por más que lo dice, nunca le hacen caso. Qué lástima, Fran. Para todos nosotros también.

Regreso al punto sobre leer. Realmente es de lo más importante. Una vez que aprendes a hacerlo, eres imparable. Tienes todo el mundo por delante. El problema es que si nos enseñaron a ver a la lectura como un castigo, como un "tienes que", será prácticamente imposible desarrollar gusto —no digamos afición— por esta actividad.

Mis libros,...

..más libros,...

...que hasta ya no caben.

¡Ah!, y está totalmente comprobado por la ciencia que es muchísimo mejor leer usando libros físicos —así como escribir con lápiz y papel— que utilizar medios electrónicos, pues se obtiene un mejor aprovechamiento del aprendizaje.

Como sé que mis cuatro lectores son una audiencia culta y conocedora, estoy 100% seguro que disfrutan leer. ¿Leer qué? ¡No importa! ¡Lo que sea que les atraiga! Así es como se logra la afición a algo: tiene que ser algo que te guste, te atraiga. Ya sea que lean el buen libro, o cómics, o novelas románticas, o un interminable etcétera, ¡qué bien! Pero hay que leer.

Tu mente se abrirá como no te imaginas.


Hasta la próxima.


4 comentarios:

  1. Excelentes recomendaciones amigo

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  2. Mi mamá fue quien me enseñó a leer y desarrollar el gusto por la lectura. Todavía recuerdo y transmito su frase: "Cuando aprendes a leer ya no estas ciego de la mente"

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    1. Algo que tiene que agradecer bastante, y una frase muy sabia también. :-)

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Gracias por tu comentario. Este será revisado, y en caso de pasar un estricto control de calidad (jajajaja, hasta yo me la creí), se decidirá si pasa a la catafixia (donde puede mejorar o empeorar, no lo sabemos). Si eres un bot, ni lo intentes. Si no lo eres, pero quieres serlo, busca ayuda amigo(a).
Ahora sí, adelante, Shakespeare.